Noches infinitas en la espera.

Quisiera que esta noche salvásemos espacios
que no caben en distancias ficticias.

Guardásemos temores que cohiben
sentimientos encarcelados.

Que por una vez rompiéramos
los principios que sostienen
convicciones artificiales.

Que arrancásemos los "nunca jamás"
que nos repetíamos
con tanta
inseguridad.

Y nos dejásemos volar.

La seguridad de un futuro medio lleno
anula una posible despedida.

Los gestos de sentimientos escondidos
fabrican los sueños de un mañana.

Y mientras, miro cada noche
si a lo mejor
me llega una señal de rendición.

Se me duermen los brazos del amor que no te hago.

Cuando el pasado solo piensa en el recuerdo

Yo me imagino que te tengo

He soñado que te perdía tantas veces

Que no me di cuenta

De que todo fue real

De que era tarde

Que a destiempo quise rescatarme

He querido fingir

Y al final logré vivir en una mentira

Que me cayó de golpe

Y me dejó helada.

Jamás había sentido tanto frío a tu lado

Y ya no consigo encender la fe que me arrastraba

Sentimientos congelados, puñales en palabras

Me duele la distancia que me dejas 

y las miradas que me (m)atan.

"La duda mata más sueños de lo que nunca lo hará el fracaso"

Las dudas, las contradicciones, los intentos desesperados por creer en los posibles y apartarse de los miedos.

La espera, el aferrarse a un puto clavo ardiendo.

Arriesgar cuando todo está casi perdido.

Agarrar los "casi" y construir templos sin cimientos.

Luchas sin espadas, sin escudos y a destiempo.

O todo es blanco o todo es negro.

El puto correr del reloj pensando que te pierdo.

Esperanzas hechas a base de recuerdos.